El conector RCA, también llamado cinch, es un conector actualmente en desuso pero muy popular en la década de los 70-80 y 90’s. Fué inventado por la Radio Corporation of America en 1940 y se estableció como un estándar en audio y video doméstico y semiprofesional. Se trata de un conector pequeño, fácil de conectar y desconectar, con varias ventajas con respecto al único conector usado para audio hasta el momento de su invención: el jack.
Ventajas del conector RCA
Su principal ventaja es su tamaño reducido aunque también dispone de otras ventajas, como su diseño con los polos más aislados entre si que reducen ruidos durante su manipulación, y que cada cable transporta su propia señal, por lo que es mucho más sencillo identificar, mediante un código de colores, qué señal transporta cada cable. Todo esto ayudó a propagar su uso en el ámbito doméstico, ya que no hacía falta ser un entendido para realizar conexiones entre equipos gracias al código de colores, y los fabricantes podian diseñar equipos cada vez más compactos gracias a su tamaño.
Inconvenientes del conector RCA
Pero esas ventajas han resultado ser también sus principales problemas al aparecer la era digital, donde hay necesidad de gran ancho de banda y comunicación bidireccional contínua entre dispositivos. Además, los conectores de la era analógica que han sobrevivido a la explosión digital han sido los más polivalentes y/o seguros para su cometido. Y en el ámbito profesional nunca ha cuajado ya que, entre otras cosas, no es posible usarlo para señales balanceadas. Por todo ello su desaparición.
Usos del conector RCA
Audio
En sus inicios el conector RCA se usó principalmente para transportar audio analógico. Con el tiempo se estableció que, para el audio stereo, el color rojo sería el canal derecho y el blanco o negro sería el izquierdo o audio mono.
También ha sido usado en sistemas de audio 5.1 y 7.1 domésticos, muy populares a principios de los 2000. Recordamos que estos sistemas son capaces de reproducir audio a través de diferentes canales mediante altavoces colocados de forma envolvente a un oyente, proporcionando a este una sensación de realidad sonora. Para ello se añadieron colores al código establecido para identificar los diferentes canales según su posición y el subwoofer.
En cuanto al audio digital también ha resultado útil para transportar audio en SPDIF con cable coaxial.
Vídeo
Para el vídeo ha sido útil para transportar señal de video compuesto (color amarillo) y para señal de video componentes RGB (Red Green Blue, los colores primarios).
Código de colores
Audio analógico
Izquierdo/Mono
Blanco
Derecho
Rojo
Central
Verde
Envolvente izquierdo
Azul
Envolvente derecho
Gris
Envolvente trasero izquierdo
Castaño, café o marrón
Envolvente trasero derecho
Castaño claro
Subwoofer
Púrpura
Audio digital
S/PDIF
Naranja
Vídeo analógico
Vídeo compuesto
Amarillo
Video por componentes (YPbPr)
Y (luminancia y sincronismos)
Verde
Pb (blue – Y)
Azul
Pr (red – Y)
Rojo
Video por componentes RGB (RGsB)
R (red)
Rojo
G (green) y Sincronismos
Verde
B (blue)
Azul
Video por componentes RGB (RGBS)
R (red)
Rojo
G (green)
Verde
B (blue)
Azul
Sincronismo Compuesto
Blanco
En Zapicables disponemos de cables RCA para diferentes aplicaciones y conectores para soldar para confeccionar cables al gusto del consumidor.
Hoy en día disponemos de múltiples tamaños, opciones y precios, y me gustaría hablaros del tema para que no cometáis los típicos errores al elegir vuestro nuevo y flamante televisor.
ERROR 1. Tamaño
Lo primero es saber a qué distancia vamos a colocar el televisor del sofá. En realidad no pasa nada si nos pasamos de tamaño o si nos quedamos cortos, verla la veremos igual, pero para disfrutarla en todo su esplendor y gozar de la máxima comodidad al visionarla se recomienda lo siguiente:
En televisiones Full HD la distancia de visionado ideal es 2,6 veces la diagonal del televisor, por ejemplo: Si tenemos una 40″ la medida de punta a punta de la tele en diagonal es de 101,6 cm. Lo multiplicamos por 2,6 para saber la distancia de visionado (101,6 x 2,6 = 264). 2,64 metros es la distancia ideal para ver una 40″ Full HD.
Si nos decidimos por uno de resolución 4K la distancia de visionado ideal es de 1,3 veces la diagonal del televisor. Fijaros que gracias a su mayor resolución, nos permite colocarnos más cerca para apreciar mejor los detalles de la imagen.
Hay que tener en cuenta que un televisor 4K la mayoría de veces no transmite a su resolución máxima por razones que expongo a continuación, así que yo me ceñiría al cálculo con la medida de Full HD.
ERROR 2. Resolución
Lo típico es que, actualmente, os encontréis teles Full HD (1080p) o 4K (Ultra HD). Las Full HD son más económicas que las 4K, aunque poco a poco se van igualando en cuanto a precio pero las 4K ofrecen 4 veces más resolución que una Full HD. Además os encontareis que os ofrecen televisores 4K o 4K con HDR.
Personalmente no creo que merezca la pena una 4K aunque las 4K con HDR mejoran sustancialmente la visión gracias a la viveza en los colores y no sería para nada una mala elección. Además, al menos en España, cuesta encontrar contenido 4K aunque cada vez se está extendiendo más. Por lo general no se le saca partido si lo que hacemos es ver la programación que ofrece la tdt como más de la mitad del español tipo. Las consolas actuales no alcanzan tal resolución, internet apenas transmite streaming en 4K (y si no tenemos fibra óptica vamos mal), el único formato capaz de reproducir 4K son los blu-ray (y solo los de última generación), y, como hemos dicho, por TDT no nos llegan resoluciones HD reales por culpa del bitrate, pero eso ya es otro tema.
ERROR 3. Conexiones
Tenemos que tener muy claro lo que vamos a conectar a nuestro televisor para elegir uno que nos brinde las entradas y salidas necesarias para las conexiones deseadas.
Parece poco importante, pero yo diría que es lo más importante. Cada vez me encuentro más gente que solo se fija en tamaño, resolución, y sobretodo precio, pero luego no se acuerdan que quieren conectar un home cinema antiguo (por ejemplo) y, después de elegir y hacer el desembolso, se dan cuenta que su nueva tele no tiene entradas analógicas, así que tienen que gastar más en conversores de señal y salen perdiendo.
ERROR 4. Fijarse solo en el precio
Básicamente un resumen de los errores 1, 2 y 3, así que, en conclusión, vale mucho la pena tener en cuenta estos consejos si queréis acabar ahorrando dinero. Y no por que la televisión sea más cara o más barata va a ser mejor o peor, todo depende de vuestras necesidades.
Las cámaras de acción son aquellas que nos permiten grabar, en alta calidad de vídeo, cualquier momento de nuestras vidas. GoPro nos abrió un mundo de posibilidades, sobretodo en el ámbito deportivo, gracias a su tamaño, calidad de grabación, autonomía, y accesorios disponibles; y aunque no le discuto a nadie que GoPro hace unas cámaras increíbles en cuanto a prestaciones y calidad de sus materiales, existen otras alternativas más económicas que pueden satisfacer vuestras necesidades sin tener que comprar una GoPro.
Para elegir la correcta deberíais fijaros en lo siguiente:
Resolución: Entre las características técnicas de cualquier cámara del mercado deberían especificar la resolución. Esta marcará la calidad de la imagen con la que graba la cámara. Las más altas de gama graban a 4K o Ultra HD. Sinceramente no creo que sea necesario y una resolución de 1080 Full HD es más que suficiente, aunque esto depende de vuestro nivel de “frikismo”. Lo mínimo que aceptaría, si comprara yo la cámara, es una resolución de 720p: hay modelos económicos con esta resolución, que dan una muy buena calidad de imagen.
Frames por segundo (FPS): Se trata de la cantidad de “frames” o imágenes que graba la cámara en 1 segundo. Contra más alto es el número, más fluida es la imagen, dando la sensación de más naturalidad. Para ir bien yo elegiría una con más de 30 fps, sobretodo si os gusta disfrutar de vuestras grabaciones a cámara lenta.
Accesorios: Una de las cosas más importantes. GoPro dispone de una gama brutal de accesorios que permiten hacer casi de todo con sus cámaras. En zapicables.es podreis encontrar algunos, aunque nada en comparación con la infinidad de los que disponen. El resto de cámaras suelen disponer de accesorios varios como soportes para manillar, casco y carcasas de protección para polvo y agua e incluso para sumergirlas en cualquier líquido.
Existen más características pero creo que las más importantes son las que os acabo de describir o, al menos, las más decisivas a la hora de elegir modelo.
Imaginemos que queremos fabricar nuestro propio cable, ya que es un cable muy extraño y comercialmente es inviable, y no se encuentra en el mercado. También es posible que se encuentre, pero sea tan raro que cueste de localizar y sea caro, o no se encuentre en nuestro país, por lo que los portes tripliquen o quintupliquen el precio del cable. Otra opción es que os queráis hacer un cable de una medida en concreto que no encontráis, o simplemente os gusta haceros vuestros propios cables porque sois unos manitas.
Pues un Pinout, en inglés, es una palabra que significa algo así como “asignación de patillaje”. En electrónica se suele usar para determinar la función de cada pin en un circuito integrado, y en informática, que es lo que a nosotros nos interesa, cómo va cableado un conector.
Así que, si necesitáis saber qué cablecito va en cada pin de vuestros conectores a soldar, por raro que sea, os recomiendo una web que contiene infinidad de pinouts de conectores, habidos y por haber, para que no se os escape ni uno. http://pinouts.ru/
Ahora ya teneis la guia. Si necesitáis material para soldar, encontraréis todo lo necesario en la tienda on-line de Zapicables. ¡Y a los mejores precios! www.zapicables.es
Hace unos años que algunas televisiones de nueva generación incluyen entre sus conexiones una HDMI que no es como las demás; normalmente encontramos debajo del conector o de alguna forma indicado que es diferente incluyendo las siglas ARC.
ARC son las sigles en inglés de Audio Return Channel (canal de retorno de audio). Significa que este HDMI en concreto es capaz de enviar el sonido de nuestro televisor a un Home Cinema o amplificador sin necesidad de conectar otro cable, como se suele hacer habitualmente, por la salida “Optical” o SPDIF del mismo.
Para que funcione, los dos dispositivos a conectar deben tener una conexión ARC y se debe activar la función en la configuración de ambos, si es que no está activada de fábrica. Además debe estar activada la función Dolby Digital del televisor y debemos utilizar un cable HDMI versión 1.4 o superior.
Los que conocemos diferentes conectores y distintas maneras de conectar dispositivos conocemos Thunderbolt gracias a Apple, y antes de investigar para escribir este artículo os habría contado que ellos lo inventaron, pero no.
La realidad es que Thunderbolt es un interfaz de conexión entre 2 dispositivos inventado por Intel. Apple lo adoptó para su conector MiniDisplayPort, siendo así capaz de transportar datos, gracias a Thunderbolt, además de audio y vídeo, como ya hacia el DisplayPort original.
En términos generales para zapicableros recién iniciados, se podría decir que MiniDisplayPort de Apple es como juntar un HDMI y un USB3.0 en el mismo conector y en un solo cable, y no solo eso, técnicamente el doble de rápido que un USB3.0 y bidireccional, puede transmitir simultáneamente en los dos sentidos y a máxima velocidad. Por otra parte mejora en velocidad a su conector “insignia”, el Firewire, y reduce el tamaño del USB y el HDMI. Como siempre Apple un pasito por delante con respecto al resto.
Gracias al gran contenido que nos ofrece internet, entre otras aplicaciones, mucha gente se pregunta como puede enchufar un portátil o cualquier ordenador a la televisión para disfrutar de ese contenido en su gran pantalla del salón. Es muy fácil pero depende de los conectores de los que dispongan los dos equipos, vamos a verlo:
Lo más sencillo es que los dos dispositivos dispongan de HDMI. Con un simple cable HDMI podremos disfrutar del contenido de audio y vídeo sin perder calidad y sin complicaciones.
Otro caso en el que nos podemos encontrar es que nuestro ordenador no disponga de HDMI pero sí de conector VGA. En este caso deberemos comprobar que nuestro televisor también dispone de él y usar un cable VGA macho-macho para transmitir la imagen, y un cable jack 3,5mm macho-macho para el audio.
Si nuestro televisor es antiguo y solo dispone de conexión scart (euroconector) o 3 RCA deberemos usar un conversor de señal de los que ya os hablé en este artículo.
Muchos tememos perder esos recuerdos de nuestras primeras filmaciones con las famosas cámaras de vídeo compactas de finales de los 80 y los años 90. No es nada difícil digitalizar estos recuerdos para tenerlos guardados en el disco duro de nuestro ordenador, o en un cd o dvd con una sencilla capturadora de vídeo, pero la realidad es que la tecnología cambia y cada vez es más complicado encontrar reproductores para los formatos en los que se guardaban estos documentos de tanto valor emocional.
Capturadoras de vídeo las hay de muchas calidades y diversos precios. Para nuestro cometido con una capturadora usb sencilla de unos 20 euros tenemos suficiente ya que, por el poco dinero que cuestan, suelen incluir un software propio para la edición de nuestros vídeos que, aunque de manera muy sencilla, permiten el objetivo principal, que es salvar los recuerdos que nos importan.
Para ello solo tenemos que instalar nuestra capturadora y su software de edición, y conectarla mediante un cable RCA al conector de salida de vídeo de nuestra cámara reproduciendo la cinta a copiar, o a nuestro reproductor VHS a través de la salida de euroconector, o cualquier aparto que reproduzca el formato en el que tengamos guardada nuestra filmación. También hay empresas que se dedican a ello, claro que nos costará bastante más dinero y no tendremos la satisfacción que genera el trabajo hecho por uno mismo. ¡Ánimo, y a digitalizar!
En ocasiones nos encontraremos conexiones de audio y vídeo imposibles que queremos realizar y no sabemos por qué no funcionan. Os explicaré lo más claro posible por qué sucede y qué soluciones podemos encontrar.
Antes de proponeros distintos casos posibles tenéis que saber algo. Existen dos tipos de señales:
Señales analógicas, que las transportan básicamente estos conectores a nivel doméstico:
Señales digitales, que las transportan estos otros conocidos también entre muchos otros:
“Quiero conectar un HDMI al Euroconector”
Os podéis encontrar en este tipo de casos al querer conectar una play station 4 a una tele antigua o un reproductor de blu-ray entre otros. Este tipo de señales son incompatibles entre si. HDMI es un señal digital de alta definición i Euroconector es analógica. Para solucionarlo existen conversores de señal HDMI a 3RCA como el de la imagen.
No compréis cables HDMI a Euroconector o a 3RCA directo como los que se pueden encontrar en algunas webs y en bazares chinos porque no funcionarán nunca.
“Quiero conectar un video VHS a mi nuevo televisor ultramoderno 4K que he comprado”
En este caso ocurre lo mismo pero en sentido contrario. Hay que transformar la señal de 3RCA a HDMI. No nos sirve el mismo conversor que anteriormente, ya que este tipo de aparatos tienen dirección (solo convierten la señal en un sentido), así que hay que comprar el conversor contrario.
“Quiero ver mi ordenador en mi televisor, pero no tiene conexión VGA”
Pues estamos en el mismo problema. La señal VGA, todo y siendo una señal analógica, no es compatible con Euroconector ni HDMI, así que existen otro tipo de conversores de señal como los siguientes.
No hace falta decir que lo mismo en sentido contrario y con otro conversor, ya que tienen dirección (la señal solo convierte en un sentido).
“Quiero conectar mi televisión a mi equipo HI-FI por la salida óptica del televisor, pero el equipo es antiguo y no tiene entrada óptica”
Aquí también necesitamos convertir la señal óptica del televisor a señal analógica de los 2RCA o Jack de 3,5mm de la entrada del equipo HI-FI para cumplir nuestro objetivo de hacer sonar la televisión por los altavoces de nuestro equipo. No es tan costoso como en casos anteriores, ya que solo hay que convertir audio.
Estos son los casos más típicos en los que hacen falta conversores. Si os encontraseis con otro o tuvieseis dudas al respecto no tenéis mas que dejar un comentario en este post, y si te ha gustado comparte.
Si os acercáis a la sección de cables de cualquier centro/tienda que se dedica a venderlos, o de cualquier tienda online como la que os estoy preparando, podréis ver que existen diferentes tipos de “calidad”, además de diferentes versiones de cable. Con lo de versiones me refiero a que veréis que unos son HDMI 1.3, HDMI 1.4, HDMI 2.0, incluso HDMI 2.1. Además os ofrecerán cables de diferente precio, justificando este como que son de mayor calidad.
La realidad es que no existe cable HDMI que transmita “con mayor calidad” que otro, la única variación puede venir de la calidad de construcción del cable, o la resistencia a impactos y tirones, en defintiva, la duración de este. Por eso hay que tener en cuenta el uso al que va destinado: si lo vamos a quitar y poner mucho, o lo vamos a dejar puesto en una instalación fija, es lo que debería determinar nuestra decisión en el abanico de “calidades” dentro de una misma versión de cable.
Lo que sí que es cierto es que hay diferentes versiones de cable y cada una con su memoria histórica y capacidad de transmisión según necesidades de la época. Voy a profundizar un poquito en esto, sin entrar en datos técnicos, porque es algo que llama la atención.
En su momento los cables HDMI 1.0 fueron creados para unir audio y video en un mismo conector, no siendo diferente de un conector DVI pero con audio. El siguiente paso fué transmitir señales de reproductor de DVD al televisor. Se creó la versión 1.1, que mejoraba el audio para cine, creyendo que poco más sería necesario en un cable de estas características.
Tres años después llego la versión 1.2. Los ordenadores comenzaban a incorporar puertos HDMI y se necesitaba un cable que fuera capaz de soportar los diferentes formatos de vídeo y resoluciones de las pantallas de los PC.
Un año más tarde aparece la versión 1.3 en la que se mejora notablemente la transmisión de audio utilizada en los HD-DVD i Blue-ray, además de mejorar la calidad de transmisión de colores que necesitaban las PlayStation3 y Xbox de la época. Aparece el mini HDMI, en principio destinado a videocámaras.
En 2009 aparece la versión 1.4,
capaz de transmitir resoluciones superiores al Full HD, o sea, el famoso 4K a 24Hz. También es capaz de transmitir vídeo en 3D y aparece el micro HDMI pensado para implementarlo en móviles y cámaras digitales.
La versión 2.0 apareció en 2013 para adaptarse a las necesidades de las nuevas tecnologías. Lo más destacado de esta versión es que amplía destacadamente el ancho de banda del cable, para que me entendáis, amplía carriles de su autopista de datos, para mejorar sustancialmente la capacidad de transmisión de audio y soporta 4K a 60Hz y HDR dinámico.
Por último, la versión más reciente actualmente: la versión 2.1 que soporta hasta 8K de resolución a 120Hz. Se ha tenido que implementar un nuevo tipo de cable llamado 48G para poder conseguir ampliar el ancho de banda.
A día de hoy comprar un cable HDMI 2.1 no vale la pena a no ser que tengamos equipos que lo demanden en sus especificaciones, pero si queremos estar a la última “por si me sirve algún día” podemos comprarlo a modo de prevención, aunque para cuando los aprovechemos realmente, habrán bajado bastante de precio, ya que su fabricacióbn estará más normalizada.
Otra cosa importante sobre los HDMI a tener en cuenta: Llegaron y se usaron principalmente para sustituir al euroconector pero el tipo de señal que transmite es diferente, así que no existen cables de euroconector a HDMI ni viceversa. Por mucho que los chinos nos los quieran vender en sus tiendas NO FUNCIONAN. En el caso de querer conectar uno con otro necesitaremos un conversor de señal. Más adelante os hablaré sobre esto.
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